Por primera vez la CAF contó con un pabellón en un encuentro de esta magnitud, lo que significó una gran oportunidad para posicionar ese espacio como el HUB de América Latina y el Caribe y, a su vez, enmarcar a la región como el lugar donde están las soluciones a los desafíos globales.

Premios Verdes fue parte del primer pabellón dedicado a América Latina y el Caribe en la COP28. Esto marca un hito sin precedentes porque ese punto de encuentro, organizado por CAF con la colaboración de Premios Verdes, se convirtió en el centro de los debates latinoamericanos sobre acción climática, y evidenció el protagonismo de los ecosistemas naturales de la región. Además de reivindicar las soluciones regionales para enfrentar la desafiante crisis, se consolidaron posturas comunes en temas como la seguridad alimentaria, la transición energética, la protección de la biodiversidad o la gestión de desastres naturales.

El impacto de ser parte en esta conferencia por primera vez con un pabellón propio es exponencial. Al ser nuestra región una superpotencia en biodiversidad y solución ante la crisis climática, es fundamental dar voz a quienes trabajan potenciando las oportunidades en los distintos territorios y ecosistemas. Así, el pabellón se convirtió en una plataforma abierta para que todos los actores pusieran en común tanto los grandes retos asociados al cambio climático, como las soluciones que se ofrecen a escala regional. El intercambio de experiencias fortaleció la voz de Latinoamérica y el Caribe y se multiplicó en eventos paralelos. En definitiva, quedó demostrado que el lema del evento, “somos solución”, pudo materializarse en acciones concretas. 

En este marco, Premios Verdes convocó a líderes y agentes de cambio globales y de la región dentro de los ecosistemas priorizados por la CAF. Nos emocionó ser parte y poder amplificar la voz de miembros de nuestra comunidad que son referentes y expertos y que tienen soluciones tangibles para mitigar la crisis climática, y asimismo potenciar las oportunidades para América Latina y El Caribe.

CAF-banco de desarrollo de América Latina- es la principal fuente multilateral de financiamiento externo de sus 19 países accionistas, que apoya el desarrollo sostenible de sus miembros y la integración regional. Atiende a los sectores público y privado, suministrando productos y servicios financieros múltiples a una amplia cartera de clientes, constituida por los gobiernos de los Estados accionistas, instituciones financieras y empresas públicas y privadas. En sus políticas de gestión integra las variables sociales y ambientales e incluye en sus operaciones criterios de ecoeficiencia y sostenibilidad. CAF apoya la tarea de quienes administran eficientemente el patrimonio cultural y aportan al crecimiento del capital natural de nuestra región. 

La urgencia de la mano de lo importante

El cambio climático ya está remodelando el planeta en diferentes escalas y dimensiones. Los efectos son cada vez más notorios. La región de Latinoamérica y el Caribe es una superpotencia mundial de capital natural, puesto que reúne todos los climas y ecosistemas y es una de las más ricas del planeta. 

Sus sistemas terrestres, costeros y marinos generan invaluables servicios ecosistémicos como alimentos (tiene aproximadamente el 15% de los suelos cultivables del mundo), agua dulce (el 33% de las reservas de agua dulce globales están en esta región), los abundantes y variados ecosistemas ayudan a la regulación del clima, entre otros. Uno de los objetivos de CAF es entonces visibilizar este potencial de la región, cuyos servicios ecosistémicos están valorados económicamente en USD 15,351,558,000,000‬.

Sin embargo, sus recursos también están ligados a los sectores de la minería e hidrocarburos: concentra al menos el 49% de las reservas de plata; el 44% de las de cobre; el 33% de las de estaño. También es la segunda zona con reservas petroleras después de Medio Oriente. Además, las masivas exportaciones agroindustriales producen deforestación de bosques y amplían la frontera agrícola. 

Pero, como decíamos antes, somos la solución y ese capital natural y biodiversidad es una esperanza para el mundo, por lo que se debe trabajar en forma mancomunada ya que hoy están seriamente amenazados. 

Durante los últimos 15 años, CAF apoyó a los países Latinoamericanos y del Caribe para que se expresen en la COP y ha buscado identificar nuevas opciones de desarrollo sostenible y resiliente, así como también nuevos aliados, con un enfoque ecosistémico, entendiendo que para acelerar la acción al ritmo que se necesita para llegar al desafío de no superar los 1.5 C, se debe abarcar múltiples dimensiones y sus interrelaciones. El pabellón en la COP28 fue una muestra de ese compromiso.  

Qué es el enfoque ecosistémico 

El enfoque ecosistémico es integrado, ya que considera todo el abanico posible de bienes y servicios e intenta optimizar la mezcla de beneficios para un ecosistema dado y entre los varios ecosistemas. También implica trascender los límites jurisdiccionales, dado que los ecosistemas por lo general traspasan las fronteras entre estados y países. Además, incluye a la gente y deja el espacio apropiado para aumentar la resiliencia y la adaptación y brindar simultáneamente beneficios de desarrollo sostenible más holísticos, lo que incluye activamente a los pueblos indígenas y las comunidades locales. A su vez, salvaguarda la biodiversidad y refuerza la seguridad alimentaria, como también adopta una visión de largo plazo. 

La estrategia BIOCAF 2022-2026 incorpora un enfoque de cinco componentes temáticos para aprovechar oportunidades de la biodiversidad en la región, y un enfoque ecosistémico transversal clave e integrador. Aquí se prioriza trabajar en diez ecosistemas que representan al menos 19,4% de los puntos críticos de biodiversidad terrestre del mundo y abarcan una gran parte de la biodiversidad de la región de ALC, que comprende un estimado del 60-70% de la biodiversidad mundial. 

Es así que el enfoque ecosistémico es apropiado para la región ya que permite tanto a los investigadores como a los trabajadores de campo, concentrarse sobre una serie de problemas al mismo tiempo. De esta forma, el ecosistema, sus habitantes, los retos y las oportunidades que ellos representan pueden abordarse lentamente y enfocarse de manera que sea factible.

Las instituciones financieras pueden ser parte de la solución para cambiar los flujos de dinero hacia resultados positivos para la naturaleza y cerrar la brecha anual, lo que es una tarea común de CAF y de los actores con los que hace sinergia. La adopción del EE por CAF en todas sus operaciones, permitirá ajustarse a dos objetivos globales del Nuevo Marco Mundial de Diversidad Biológica: cero pérdida neta para el año 2030 y ganancia neta para el año 2050.

Esto es parte de lo que dejó la COP28 y el primer pabellón dedicado a América Latina y el Caribe, sin duda un acierto de la CAF -banco de desarrollo de América Latina- y en donde Premios Verdes tuvo la oportunidad de colaborar sumando su experiencia en materia de sostenibilidad y su red global de expertos y referentes de la región.

Noticias en la Redes de CAF: Culminó con éxito la participación de #CAF en la #COP28 de Dubái.